Hoy no sólo te llevo en el corazón, si no que ardes en mi piel con pasión, mi más grande creación, mi más grande anhelo, mi más grande logro, mi sueño hecho realidad.
Las ahujas que en mi piel depositaron tinta y debieron causar dolor, no duelen tanto como el saber que tus labios húmedos, que pude saborear con pasión, inmóviles esperaban pasar por mi demostración y jamás buscaron corresponder.
Sin duda fue un hito en mi vida y siempre mi piel recordará, que existe amor para dar y sucubos que solo esperan beber de ti la vida, esperanzas y sueños.
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