viernes, 19 de octubre de 2012

Aventuras medievales - La Fragua del Dragón 1x07

Capítulo 7

En vista de lo que aconteció, se reunió una multitud, se detuvieron incluso varios actores a ver la conclusión de nuestro encuentro.

-Caballero sus habilidades no tienen igual, le presento a usted nuestros términos, acepte la mitad del premio o un nuevo reto, doblaremos la distancia de la Diana y se cambiará el objetivo por una manzana- parecía prudente aceptar la mitad del premio, pero me estaba divirtiendo demasiado así que acepte el reto.

Se anunció el evento, el encargado del puesto en vista de que podía perder como segunda opción empezó a organizar apuestas entre los allí presentes, en circunstancias normales no lo habría permitido, pero la gente así lo deseaba, pues quieran participar de alguna manera en nuestra competencia.

Se realizaron los cambios pertinentes, la multitud guardo silenció, pues el arquero se preparó para hacer su tiro, tenso la cuerda un poco más fuerte de lo que anteriormente lo había hecho, al liberar la flecha, en un parpadeo llego a su destino, se clavó en la manzana.

Sin duda los presentes estaban sorprendidos por la proeza, lo vitoreaban mientras yo me preparaba, ya antes me había percatado de que la cuerda no tensaba lo suficiente, con este arco no alcanzaría la distancia, sería inapropiado cambiar el arco, se vería como una escusa, por lo cual, lo desmonte, acorte la cuerda haciéndole un amarre en el extremo, posteriormente lo monte otra vez, prepare mi tiro, tense la cuerda fijando el destino de la flecha, realice mi tiro.

La fecha atravesó la manzana y se clavó aún más lejos del objetivo, los presentes entusiasmados estaban que no cabían en sí de alegría, pues les pareció muy divertido todo lo que pasaba, el arquero estaba asombrado de que pudiera igualar su proeza.

-Ahora yo propongo un reto, en vista de que hemos empatado otra vez, si no tienen inconveniente...- se me ocurrió una práctica que me dio mi padre una vez, aún que no eran las mismas circunstancias podía emular las condiciones con algunas similitudes.

-Cual es su propuesta caballero?- me pregunto el encargado

- Sólo tendrá que imitar mi tiro, si el puede acertar igual que yo, le concederé la victoria- les propuse aún que sabía que su respuesta sería afirmativa pues hasta ahora habíamos demostrado iguales habilidades.

Entonces me propuse a preparar las condiciones a imitar, primero que nada la Diana sería una calabaza, del tamaño aproximado a la cabeza de un adulto, estaría ubicada a 25 pasos.

Posteriormente dispuse un barril que estaba cerca, acostado era bastante inestable, sobre el una tabla gruesa que podría soportar mi peso pues me balancearía en ella, además le indique a los presentes que recogieran piedras, explicándoles después que cuando yo estuviera listo empezaran a arrojarme las al cuerpo, sin tratar de pegarme a la cabeza, cuando todo estuvo listo me propuse a realizar mi tiro.

Subí a la tabla balanceadome sobre ella, empezaron a lanzarme rocas al cuerpo algunos con mayor puntería que otros, en tanto yo mantenía el equilibrio, realice mi tiro a expensas de recibir algunas pedradas, acerté en el centro de la calabaza a 25 pasos de distancia.

Mi oponente procedió de la misma manera, aunque pudo dominar hasta cierto punto el equilibrio en la tabla, parecía que las piedras eran su mayor preocupación, pues en varias ocasiones preparo su tiro y lo cancelo por esquivar una roca, en la primera oportunidad realizo su tiro haciendo uso de sus habilidades, la flecha paso a escasos centímetros del objetivo pero no dio en el blanco, se había declarado un ganador.

Los presentes no daban crédito, les pareció a algunos un montaje y exigían una explicación, pues no podían creer que un arquero que pudo acertar a una manzana al triple de distancia de lo que estaba la calabaza allá errado en su intento de superarme.

- Sin duda su indignación es más por haber perdido en sus apuestas que por la falla de mi oponente, sin duda el es un excelente arquero, pero cuando las condiciones son controladas, en la última prueba debía preocuparse por más que sólo tensar el arco, había elementos a su alrededor que tenía que considerar además de acertar en el objetivo, a mi me enseñaron que la arquería depende de todos esos elementos, por eso eh triunfado en esta oportunidad.

Mi explicación fue suficiente para calmar el ánimo de los presentes, no así el de mi rival, que estaba verdaderamente molesto consigo mismo, pues se le escuchaba decir algunos improperios en italiano con una dulce voz, así con una voz femenina, cual fue mi sorpresa para demostrarme todo su enojo se descubrió el rostro, era el rostro de una bella mujer, sus ropas ocultaban su silueta femenina pero su rostro era sin lugar a dudas el de una joven.


Fin del capítulo 7.

No hay comentarios:

Publicar un comentario